La Diócesis inicia el proceso de implantación del Compliance o cumplimiento normativo encaminado a las buenas prácticas

Desde hace algún tiempo la palabra Compliance suena con fuerza. Con relativa frecuencia se escucha hablar de su implantación en empresas u organizaciones y en el caso de la Iglesia, la Asamblea Plenaria de noviembre de 2022, aprobó el sistema de Compliance para la Conferencia Episcopal Española, un manual de cumplimiento normativo y buenas prácticas adaptado a la la naturaleza e identidad de la Conferencia Episcopal Española.

Ahora son las diócesis las que están elaborando su propio Compliance y en el caso de la Diócesis de Ciudad Rodrigo, esos trabajos ya han comenzado con el apoyo de la empresa Alter Consultores Legales.  

En primer lugar, conviene aclarar ¿Qué es el Compliance? El Compliance o cumplimiento normativo consiste en establecer las políticas, procedimientos y buenas prácticas adecuadas y suficientes para garantizar que una empresa desarrolle sus actividades conforme a la normativa vigente y a las políticas y procedimientos internos, promoviendo una cultura de cumplimiento entre sus empleados, directivos y agentes vinculados.
La función de Compliance es la de identificar y clasificar los riesgos operativos y legales a los que se enfrentan las entidades, en este caso la Diócesis, y establecer mecanismos internos de prevención, gestión, control y reacción frente a los mismos.
La función de Compliance nace en el mundo empresarial anglosajón, y más concretamente en el sector financiero y farmacéutico, industrias que tradicionalmente han estado sometidas a una regulación bastante rigurosa, pero está irrumpiendo con fuerza en todos los sectores.

En nuestro país es una función relativamente reciente que se inicia, hace algunos años, de la mano del sector financiero, y que se asociaba, en un primer momento, al mero cumplimiento de las leyes en el sentido más formalista.
Sin embargo, tras la entrada en vigor de la Ley Orgánica 5/2010 de la Reforma del Código Penal, que introdujo en España la responsabilidad penal de la persona jurídica convirtiendo a las personas jurídicas en sujetos inmediatos del Derecho Penal susceptibles de cometer delitos, al margen de las concretas personas físicas que las integren, pueden ser por ello sancionadas con auténticas penas.

Los beneficios que tiene trazar este sistema son varios y entre ellos se incluye el de disponer de una visión global de la Diócesis y actividades dependientes, de tal forma que se pueda instaurar un protocolo documentado de control, que garantice ya no solo el cumplimiento de la normativa, sino también medios de prueba para acreditar dicho cumplimiento.
Por otra parte, contribuye a minorar la posible comisión de infracciones en el ámbito administrativo, reduce cualquier posible riesgo reputacional derivado de la realización de una conducta ilícita e inadecuada, mantiene y garantiza frente a terceros una cultura de transparencia y tolerancia cero frente a la comisión de posibles ilícitos penales.

La implantación del sistema Compliance se hará por fases y en primer lugar se debe analizar la estructura/organigrama de la Diócesis. Después de ese trabajo, que incluirá numerosas entrevistas y reuniones, se elaborará un manual de prevención de riesgos que, posteriormente, se implantará. Esta última fase lleva aparejada la creación de un Comité de Seguimiento, la formación del personal o la puesta en marcha del Canal de Comunicación y Denuncias penales. En este sentido hay que recordar que la Ley de protección del denunciante entró en vigor en España el 13 de marzo de 2023. Esta nueva normativa obliga a las organizaciones a implementar un canal de denuncias interno. A partir de ahora, tener un canal de denuncias es obligatorio para todas las empresas con más de 50 trabajadores.

El Obispo, Mons. José Luis Retana, ha dado un paso adelante para que esta herramienta se implante en sus dos diócesis pues se entiende que es beneficiosa para el propio funcionamiento interno y un ejercicio más de transparencia.

En la foto que acompaña esta información se ve a parte del equipo de la Diócesis implicado en el desarrollo del Compliance y a los representantes de Alter Consultores Legales en una reciente reunión de trabajo.