Manos Unidas inicia su campaña con una Eucaristía en El Sagrario el viernes

La Campaña XLI, de Manos Unidas, lleva por lema “QUIEN MÁS SUFRE EL MALTRATO AL PLANETA NO ERES TÚ”. Nos invita a tomar conciencia de la dramática situación de destrucción que afecta a la “casa común”, con la consiguiente desaparición de ecosistemas y el deterioro del territorio y la vida de las comunidades más pobres. Como dice el Papa Francisco: “¡Este es el tiempo oportuno para cambiar de vida! Este es el tiempo para dejarse tocar el corazón, de escuchar el llanto de todas las personas inocentes a las que se les han robados sus bienes, su dignidad, sus afectos y la vida misma”.

Durante los doce meses que dure la Campaña, Manos Unidas se va a centrar en denunciar las consecuencias que el deterioro medioambiental tiene sobre millones de personas, porque la crisis climática tiene, ante todo, un rostro humano: el de 821 millones de personas castigadas por el hambre; el de los más de 1.000 millones de pobres; el de quienes deben emigrar en busca de un sustento que la tierra les niega o de los que enferman a causa de la contaminación de las aguas y de los suelos.  

Además de las labores de denuncia y sensibilización que lleva a cabo en el marco de su trabajo de educación para el desarrollo, Manos Unidas apoya proyectos que ayudan a las comunidades a adaptarse a los cambios medioambientales y climáticos y promueve iniciativas destinadas a ayudar a las cada vez más numerosas personas que se ven obligadas a migrar, dejando atrás toda su vida, como consecuencia de la crisis climática. Iniciamos en estos días la nueva campaña que durante 2020 girará en torno al “cuidado de  nuestra casa común”; un cuidado que viene requerido por el actual deterioro medioambiental que merma la dignidad de millones de seres humanos.

La tierra es un don hecho a la humanidad entera para su propia supervivencia. Se nos regaló para que la cuidáramos y labrásemos pero la hemos convertido en un lugar casi inhabitable en el que se multiplican día a día los rostros de seres humamos con su dignidad arrebatada.

Por eso es necesario escuchar el clamor de la tierra y el clamor de los pobres. Urge tener presente que la pobreza y la fragilidad del planeta son dos caras de una misma realidad que bien podría llamarse INSOLIDARIDAD.

En Manos Unidas hace más de 60 años que acompañamos a las comunidades más desfavorecidas del Sur. Luchamos contra el hambre y la miseria pero no solo contra sus efectos – vidas vulneradas, aplastadas e inhumanas- sino también contra sus causas. Entre ellas se encuentra el maltrato a la tierra, la privación d posibilidades para obtener los recursos necesarios para vivir y la vulneración de los derechos humanos, sobre todo los de mujeres y niñas, que son los grupos de población más vulnerables.

Las actividades de la Delegación diocesana de Manos Unidas son las siguientes:

  • VIERNES 7 DE FEBRERO: EUCARISTÍA EN LA PARROQUIA DE EL SAGRARIO A LAS 19:15 HORAS.
  • OPERACIÓN BOCATA: VIERNES 13 DE MARZO EN LA PLAZA DEL BUEN ALCALDE
  • CONFERENCIA Y CENA SOLIDARIA: JUEVES 26 DE MARZO EN EL COLEGIO MISIONERAS-TERESIANAS.